sábado, 14 de marzo de 2015

Bestia verde, negra, pestilente

De mis entrañas nació muerto el quiste canceroso que albergaba, mi sangre es tan amarga que mató al cáncer mismo que años antes me carcomía. Me han dicho los doctores que la sangre amarga terminará por matarme, habrá de corroer mis venas y arterias, licuará mis órganos como ácido latiendo en mi interior; soy una bomba ácida de tiempo y no sé ni siquiera cuánto tiempo me queda antes de volverme una masa sanguinolenta, pestilente y amargada que se desparrama por el suelo burbujeando. No tiene sentido este estado médico, me hicieron mil preguntas y analizaron mil veces mi sangre, soy la bilis más negra, el más amargo veneno, beber mi sangre seguro amargaría de por vida a esa boca tonta e insensata, maté a la muerte con mi verde veneno. Me siento todopoderoso al saber que vencí una vez a la muerte, aunque deba morir después en el contragolpe. al menos consta que la primera batalla la he arrebatado de sus manos, no sé lo que voy a hacer ahora, miles de ideas me nacen, brotan ¡Soy inmune! ¡Soy Dios! Dicen que estoy loco pero ahora me niego a compartir mi espacio vital con los simples mortales, con una gota de mi sangre cierro sus labios necios para siempre, soy un monstruo horrible que se alimenta de tu carne, que satisface su sed con tu sangre dulce que causa agonía y llanto en mis labios. Sello sus ojos con un beso y entre sollozos los dejo desaparecer. Soy cruel, soy hipocresía, soy espanto, soy muerte dadivosa que entrega todo a los que nunca han pedido algo. Corren de mi lado, corren a mi espalda, al frente, arriba y abajo; temen a mi vista, a mi sombra, incluso a mi retrato. Ya no importa, vendrán por mí en un rato. Se librarán pronto de esta joda, ninguno se sienta ofendido ahora, es coincidencia que a ustedes les toca. Un poco de muerte sin sentido, de vez en cuando a todos se nos antoja. No entiendo por qué lloran...

No hay comentarios:

Publicar un comentario